Cuando una relación se acaba toca decir adiós al amor... y ¡no a la guerra! Olvídate de rencores y rencillas y prepárate para sacar tu artillería en educación y clase. Te ayudamos a ser una perfecta ex.No es políticamente correcto hablar de esto pero... cuando los datos hablan, es de sabio escucharlos. Y las cifras dicen que la posibilidad de que tu pareja se convierta en tu ex es... ¡del 90%! Es más, como asegura Purificación Pujol (juez y autora de Un divorcio elegante), “no hay que buscar una buena pareja, sino un buen ex. Si tienes un hombre estupendo y te separas bien, no ocurre nada negativo. Pero si tu pareja se convierte en un mal ex... tu vida será un martirio”. Por eso merece la pena “prever” como sería tu chico como futuro ex, e ir así iniciándole en las artes de la “separación perfecta” (¡algo que debes aplicarte tú también!).
Si ya estás inmersa en una ruptura amorosa, te explicamos las fases por las que se pasa y las claves para llevarla con estilo. Comprobarás los beneficios que para ambos tiene romper de un modo elegante y sin provocar heridas innecesarias. “Hay que desenamorarse con estilo –explica Purificación– y asumir la adversidad, tanto si dejas como si te dejan, con dignidad, educación y respeto. ¿Por qué desear lo peor a alguien que en su momento te hizo bien?”. Veamos cómo conseguirlo.
Fase 1: Dolor e incertidumbre
Tras la ruptura, el estado de ánimo de la parte abandonada pasa por las siguientes etapas:
1. Negación (todavía tiene la esperanza de que eso no le esté pasando, y cree que podrá recuperarlo).
2. Tristeza (cuando lo asume, el dolor se intensifica, puede bajar su autoestima y también sentirse descolocado o perdido).
PARA SUPERARLO:
1. NO TE MARGINES ni te escondas del mundo, y potencia una actitud positiva.Y recuerda: relativiza tu problema.
2. QUIÉRETE MÁS y mímate como nunca (¡tienes más tiempo para ti!), y no vayas de víctima por la vida
3. AMPLÍA TU HORIZONTE y apúntate a actividades que te apetezcan (si son benéficas además te sentirás un poquito mejor con el mundo), abre tu mente y disponte a conocer gente nueva.
4. REFUERZA TUS LAZOS con la gente que te apoya y que sabes que te quiere: familiares, compañeros, amigas... LO ELEGANTE ES...
Centrarte en ti... ¡y no en él! Si le has dejado, te toca respetar su dolor y darle su tiempo. Si te han dejado, canaliza tus pensamientos en tu persona: si quieres llorar, llora, desahógate con tu gente y habla... pero siempre desde tu dolor y necesidad de recuperación (y nunca desde la crítica al otro). ¿Lo ideal? Pensar solo en ti, en tu cuerpo, en tu bienestar, mimarte, darte caprichos, quererte...
Fase 2: Toma de conciencia
Como dice Pujol, “cuando has conseguido recuperar tu propio yo, es el momento de superar el sentimiento de propiedad o pertenencia”. Es decir, darte cuenta de que ya no tienes, sentimentalmente hablando, nada que ver con tu ex.
PARA CONSEGUIRLO
1. NO PREGUNTES ni te intereses por la vida del otro (y menos aún, si los tenéis, a través de vuestros hijos). No tienes derecho a controlarle, ni a saber a dónde va o con quién. Lo que haga o deje de hacer con su vida, ya no te incumbe.
2. RETIRA de tu entorno todos los objetos o cosas que te recuerden a él. O se lo devuelves (amablemente) ¡o a la basura!
LO ELEGANTE ES...
“Intentar molestar lo mínimo a tu ex pareja, explica Pujol; eso es lo correcto y debería ser algo elemental. Se vivirán momentos muy complicados, sobre todo si hay bienes o hijos compartidos, pero hay que anteponer el respeto”. ¿Lo ideal? Pensar en él como alguien a quien quisiste en el pasado (no es tu enemigo, solo un ex), y ser generosa y desearle lo mejor. “La educación se demuestra tratando de molestar lo mínimo, ¡y de beneficiar al máximo! ¿Por qué no vas a desearle lo mejor a alguien que fue tu media naranja; porque te ha –o le has– dejado?”, pregunta Purificación. Si a tanto no llegas (somos humanos) con no molestar vale.
Fase 3: Actúa
Si estás mentalmente bien (no te has dejado vencer por la ira, la rabia ni el dolor), y además has aprendido a respetar vuestros nuevos límites sin invadir –ni dejar que invadan– tu territorio, ya estás preparada para pasar a la acción. ¿Y eso qué significa? Divorciarse legalmente. Puedes aplicar los mismos conceptos (morales) tanto si sois pareja de hecho como si no estáis legalmente casados.
PUEDE CONSEGUIRSE
1. DE MUTUO ACUERDO a través de un convenio regulador.
2. DE FORMA CONTENCIOSA o, lo que es lo mismo, planteando el tema en un juzgado, y dejando que el juez sea quien decida las resoluciones.
LO ELEGANTE ES...
“Que haya acuerdo entre las partes. Lo peor que te puede pasar es que un tercero decida por ti, ya sea un juez o un amigo”, explica Purificación Pujol. “Lo mejor, más sensato y elegante es que se llegue a una solución que beneficie a ambas partes, y eso solo lo sabe la pareja; un tercero jamás, por mucho que le presentes los papeles”, explica. ¿La buena noticia? ¡Cada vez somos mejores ex! En lo que llevamos de 2012, según el INE, un 7,7% de las rupturas matrimoniales en España han sido consensuadas, lo que significa un aumento del 3% con respecto al año anterior. Si decides pese a todo ir a juicio, te conviene tener siempre en cuenta las siguientes recomendaciones legales.
CONSEJOS LEGALES
1. Busca un abogado psicólogo. Es decir, un profesional que además de saber de leyes tenga la suficiente capacidad empática para sensibilizarse contigo y, por ejemplo, no airear según qué cosas en el juicio que puedan avergonzarte (ojo porque el abogado de la otra parte no será así).
2. No ir con mala fe. “Nuestra legislación no está preparada para las actuaciones ilógicas, sin sentido común y malvadas, a no ser que rocen el delito”, explica la juez. “En las normas jurídicas impera el sentido común, así que si pides algo que lo tiene, se te concederá”.
3. No firmes ningún documento ni llegues a ningún acuerdo sin el debido asesoramiento jurídico. Y recuerda, las sentencias son apelables: si se consideran injustas deben recurrirse.
Fase 4: Nuevo amor
Bienvenida a la mejor de las etapas. Tras una separación o divorcio maduro y sano, y con tus heridas o recuerdos ya lavados con el paso del tiempo, estás preparada para dejar que un nuevo amor te reclame. Y no pongas cara de dudas: ¡cuatro de cada cinco personas divorciadas vuelven a casarse! Es más, como asegura Purificación Pujol: “las nuevas relaciones suelen ser más reflexivas y serenas, más libres, más limpias”. Así que sonríe a la vida y a tu nueva pareja, siempre y cuando hayas averiguado qué tipo de ex puede llegar a ser...
