
Besos 'ácidos'
Labios que huyen de la discreción y llenan el rostro de luz y color. Fórmulas en mate o brillo que se unen al grito de ‘esta boca es mía’ convirtiéndola en el centro de todas las miradas. El abanico de colores va desde los rojos más 'chic' hasta los naranjas más ácidos, pasando por diferentes tonos coral o rosas.

Verdes, azules, amarillos, naranjas… Cualquier color sirve para enmarcar la mirada y hacerla destacar acompañando, o no, a los labios, que pueden lucir igual de intensos u optar por tonalidades naturales para ceder todo el protagonismo a los ojos. Trazos más o menos 'juguetones' sobre el párpado móvil o fijo que llenan de fantasía estos 'looks' primaverales.
Como habréis podido comprobar, con esta tendencia no hay medias tintas y los colores se lucen tan saturados como sea posible. Muy al contrario de lo que suele ocurrir, en este caso, más es más.